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  • El valor auténtico del Parmigiano Reggiano Orgánico Poggioli.

    9 diciembre 2025 · Caseificio Poggioli

    El Parmigiano Reggiano Orgánico del Caseificio Poggioli no es solo un queso: es el relato de una tierra generosa, de pastos exuberantes y de personas que realmente creen en la calidad y el respeto a la naturaleza. Todo comienza en nuestras granjas, donde el esmero por la alimentación de las vacas es la primera promesa de excelencia. Nuestras vacas se alimentan, día tras día, con forrajes seleccionados, 100% libres de OGM, para ofrecer, temporada tras temporada, leche rica y pura, la base preciada de un Parmigiano Reggiano auténtico.

    Este cuidado nos ha valido la certificación orgánica: un reconocimiento que relata nuestra historia y los valores que animan cada uno de nuestros gestos cotidianos.

    De la Tierra al Queso: una cadena de excelencia, certificada y transparente

    Nuestra leche orgánica proviene de “La Cappella”, socio que eligió la agricultura limpia desde 1998 y la cría biológica desde el año 2000. Todo el proceso productivo está supervisado y garantizado por el I.C.E.A. (Instituto de Certificación Ética y Ambiental), para que cada sabor esté respaldado por una cadena transparente que lleva el producto -junto con su historia- hasta la mesa.

    La transformación tiene lugar en la Coop. Láctea Poggioli, donde disponemos de tanques y calderas exclusivos para lo orgánico: un gesto de amor hacia el consumidor, que nos permite crear piezas únicas, certificadas y trazadas en cada detalle. La trazabilidad está asegurada por sistemas innovadores -como el código Datamatrix en las placas de caseína- que cuentan la historia de cada rueda en segundos.

    Compromiso con la seguridad y la bondad

    Incluso durante la maduración, nuestras piezas orgánicas se conservan con especial atención, en ambientes dedicados y separados de las tradicionales. Cada fase está regulada por estrictos controles de calidad y sistemas como el HACCP, para brindarte la certeza de un Parmigiano Reggiano no solo bueno, sino también seguro y certificado.

    ¿Quieres sumergirte en la experiencia del auténtico Parmigiano Reggiano Orgánico?

    Déjate conquistar por la bondad natural y la historia detrás de cada lasca.

    Si deseas recibir más información o un presupuesto sin compromiso, escríbenos a caseificio.poggioli@gmail.com o llama a Sisto Romani al +39 059 783155: estaremos encantados de acompañarte a descubrir lo que para nosotros es mucho más que un queso: es una emoción para vivir y compartir.

    Caseificio Poggioli

    L’immagine mostra tre pezzi di Parmigiano Reggiano confezionati sottovuoto. Ogni pezzo ha una forma caratteristica e una confezione trasparente che lascia vedere la crosta e la pasta del formaggio, dal tipico colore giallo paglierino chiaro. La superficie del formaggio è leggermente ruvida e presenta la tipica grana del Parmigiano Reggiano. A sinistra si trova il pezzo più grande: è a forma di spicchio triangolare, simile a una fetta di torta molto alta e massiccia, con la base più larga appoggiata sul piano. Sopra questo pezzo si trova una grande etichetta sagomata, per metà rossa e per metà bianca. Sulla parte rossa c’è l’immagine di una scaglia di formaggio, la scritta “Parmigiano Reggiano” e, in arancione, “Poggioli”. Sulla parte bianca c’è il logo Parmigiano Reggiano su sfondo nero, la scritta “Biologico” in verde e altri marchi di certificazione. Sulla base, una piccola bandiera italiana. Sulla destra si trova invece un pezzo di forma rettangolare, con angoli smussati e superficie liscia ma irregolare nelle sfumature, che richiama quella di una mattonella allungata. Anche questo pezzo ha una grande etichetta rossa e bianca con le stesse scritte: “Poggioli”, “Parmigiano Reggiano”, “Biologico”, il logo Parmigiano Reggiano e un piccolo loghetto verde che indica la certificazione biologica europea. In primo piano, di fronte agli altri due, c’è un pezzo più piccolo, anch’esso triangolare e sottile, simile a una fetta; è anch’esso confezionato sottovuoto ed etichettato in modo analogo. Tutti i pezzi sono posti su uno sfondo completamente bianco e luminoso, senza altri oggetti. Le confezioni lasciano vedere bene la pasta compatta e la crosta. Predominano i colori caldi e naturali del formaggio (dal beige al paglierino), il rosso vivo e il bianco delle etichette, con tocchi di verde per la dicitura “Biologico” e il logo europeo. In basso a sinistra sulla grande fetta si vede anche una miniatura stilizzata della bandiera italiana.

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